Un ex River y Boca fue suspendido por cuatro años

El defensor que actualmente se desempeña en Guaraní de Paraguay, Julio César Cáceres, sufrió una dura sanción por parte del tribunal de disciplina tras conocerse los resultados positivos de su análisis antidopaje posterior al encuentro entre su equipo Guaraní y Sol de América en agosto del 2016.

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El encuentro en el cual Sol de América venció a Guaraní por 3 a 0 en la liga paraguaya dejó más que una derrota para los aurinegros. El examen antidoping que se le llevó a cabo a Cáceres posterior a aquel partido arrojó un resultado positivo a una sustancia prohibida. El elemento que saltó como consecuencia en la prueba fue la octopamina. El defensor, que formó parte de la selección de Paraguay y jugó en diez equipos a lo largo de su carrera explicó que dicha sustancia pudo haber sido ingerida en una ronda de tereré al consumir una yerba que contiene un derivado natural de la naranja agria. La defensa que esbozó el futbolista fue apoyada por su abogado pero el panorama del central de 37 años es muy complicado.

Si la ingesta realmente fue a través de ese mecanismo que explicó Cáceres, no le quita responsabilidad. Él tendría que saber que no la puede consumir por ser un producto que está incluido dentro de las sustancias prohibidas de la Agencia Mundial Antidopaje. La octopamina puede llegar a quemar grasas y es considerada como un estimulante en el organismo.

El futbolista tuvo un polémico paso por el fútbol argentino porque jugó en los dos equipos más grandes de aquel país. Llegó a River Plate en el año 2006 y en el 2008 jugó en Boca Juniors hasta el 2010. Otro de los grandes futbolistas paraguayos que ha pasado por Argentina y que fue referente en la Selección de Paraguay ha sido José Luis Chilavert, quien le dio su apoyo a Cáceres: “Conozco a Julio César Cáceres, un gran compañero y profesional, siento mucho que lo hayan dañado de esta manera“. Y más tarde, el histórico portero de Vélez agregó: “Julio César, mi solidaridad contigo. Siento mucho que hayan tomado esta decisión tan inesperada. Cuatro años es media vida profesional“.

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Julio Jiménez, de la Comisión Disciplinaria de la Organización Nacional Anti-Dopaje de Paraguay (ONAD), declaró que fueron 6.9 nanogramos por milímetros lo encontrado en el cuerpo del paraguayo. La violación de este código establecido por la ONAD y la reacción de Cáceres de negarse a realizar una contraprueba de antidoping llevó a que se lo sancione por cuatro años sin la posibilidad de realizar profesionalmente fútbol. Dos años por el resultado y otros dos por la negación a la contraprueba que lo único que hace es culparlo aún más. Dada su avanzada edad, lo más probable es que el defensa se retire del fútbol por esta abrupta sanción aunque aún no se ha referido oficialmente al respecto.