El calvario de Rio Ferdinand

Retirado y alejado del ambiente del fútbol, Rio Ferdinand atraviesa un drama que parece no acabar. Todo inició con la trágica muerte de su esposa, a ello se sumó su retiro del fútbol, su adicción al alcohol y varios inconvenientes más.

Pasó de ser alabado por millones de personas a pensar seriamente la posibilidad del suicidio. Sigue leyendo la terrorífica historia del ex capitán del Manchester United.

La muerte de su esposa

El golpe más fuerte que puede sacudir a un ser humano es el fallecimiento de un ser querido. Lamentablemente, fue lo que le tocó vivir a Rio Ferdinand en 2015 cuando su mujer Rebecca Ellison de 35 años dejó de existir a causa de cáncer de mama. Él expresó: "Yo nunca pensé que fuera a pasar. Ella se marchó diez semanas después de diagnosticarle el cáncer".

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¿Cómo la conoció?

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Rio y Rebecca se conocían desde hacía años. Ella había sido la novia de toda la vida e iniciaron su relación en el 2000 cuando él le pidió su número telefónico. Cuentan que ella en un principio se resistió aunque luego accedió al punto de dar nacimiento seis años más tarde a su primer hijo.

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Una especie rara en el ambiente

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Lejos de ser una modelo o actriz voluptuosa que suelen salir con los jugadores y luego casarse, Rebecca Ellison no era nada por ese estilo, no era amiga de las fiestas ni salir en los medios. Ella estudió contabilidad y se manejó con mucha discreción al lado de su pareja de la vida.

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Viudo y con tres hijos

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El giro inesperado que tomó su vida luego del fallecimiento de su esposa lo dejó sólo con sus hijos. "Nadie está preparado para una pérdida como esta. Ella me dijo antes de irse que sería un papá y una mamá magnífico para los niños" reveló Rio en una entrevista a un prestigioso medio inglés.

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Tratamiento ineficaz

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En 2013 comenzó la pesadilla para la familia Ferdinand - Ellison cuando Rebecca fue diagnosticada con cáncer de pecho. Fue allí cuando tuvo su primer tratamiento y en 2015 re-apareció cuando se pensaba que ya lo había superado. Con más fuerza y agresividad, esta enfermedad tomó su vida en menos de 70 días.

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Encontró la "solución" en la bebida

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El ex defensor central fue mejorando con el tiempo aunque los primeros meses fueron muy duros: "Al principio, bebía mucho por las noches después de acostar a los niños. Hasta que un día me desperté y no era capaz de llevarles al colegio". Sumado a ello, tuvo un accidente automovilístico por estar ebrio.

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"Sufrí ataques de pánico"

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A colación del desastre que cambió para siempre su vida, Ferdinand sufrió no sólo mentalmente sino físicamente el golpe. Sus reveladoras palabras fueron: "Sufrí ataques de pánico y me di cuenta que necesitaba ayuda". Por su suerte, día a día fue mejorando y pudiendo dejar de lado estos episodios.

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Pensó en quitarse la vida

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La decisión de no quitarse la vida pasó exclusivamente por la presencia de sus hijos y el no querer dejarlos solos. "Antes leía los periódicos y veía gente que se había suicidado y pensaba que eran unos egoístas, que cómo podían hacerle eso a sus seres queridos. Cuando miro a mis hijos sé que no podría hacerles eso" reveló el futbolista. Estos pensamientos torturaron su cabeza los días que pasó encerrado en su casa.

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Su apago al anillo

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El dolor que sintió el defensor fue tan grande que ni siquiera pudo desprenderse del anillo de matrimonio que lo unía sentimentalmente a su difunta pareja. Ello suele suceder en estos casos ya que es un apego material/sentimental que crea la ilusión de seguir conectados y que no haya desapego.

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Cayó en la cotidianidad

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En esa vorágine de situaciones negativas y sentimientos de los más dolorosos que una persona debe afrontar en su vida, Ferdinand tocó fondo. Fue cuando no pudo ocuparse de sus niños que pudo reaccionar ante la situación y darse cuenta que necesitaba ayuda, ayuda profesional.

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La realidad lo abofeteó

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Como si se tratara de un sueño perfecto que de repente te hace despertar y afrontar la dura realidad, Ferdinand atravesó situaciones complicadas. "Estaban por llegar tarde a la escuela y me pregunté ´Mamá qué haría?´" detalló. Y agregó: "Tuve que ir a sentarme a una habitación y pensar que hacer".

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Su pensamiento inicial

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Quien fue uno de los mejores defensores en la historia de los Diablos Rojos y también de la selección de Inglaterra, en un principio no quiso exteriorizar su dolor. "Uno no quiere que la gente lo compadezca. En la cultura machista que me rodeaba, cuando alguien se sentía así, parecía que fueras débil" lamentó.

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Su retiro del fútbol

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El adiós al deporte que le dio todo en la vida no fue lo que un futbolista de su talla merecía pero las circunstancias que atravesaba lo generaron de ese modo. Tan sólo un mes del fallecimiento de Rebecca, en mayo del 2015, colgó los botines en el Queens Park Rangers tras 18 temporadas y 81 encuentros con la selección mayor.

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19 títulos

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Durante su estadía como profesional, Ferdinand mostró grandes cualidades defensivas, incluido juego aéreo y capacidad en el mano a mano. Fueron seis títulos de Premier League los que cosechó. Además una Copa de Inglaterra, tres Copas de la Liga, seis Community Shield, una Supercopa de Europa, un Mundial de Clubes y una Champions League.

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Entendió tiempo después el rol de una madre

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Ferdinand valoró aún más lo hecho por su esposa Rebecca una vez que no estaba y debió hacerse cargo de sus hijos. Quizás el estar no tan presente por ser un futbolista de élite no lo tenían tan pendiente del día a día y de los esfuerzos que ella hacía. "No sabía como funcionaba la lavadora o la secadora de ropa, ni sabía como ir al médico, sólo había visitado al del club" declaró él.

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"Los hombres somos ignorantes"

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El ex número 5 relató que él solía despertarse, vestirse, desayunar en familia, llevarlos a la escuela y luego enfilar para el entrenamiento. Y agregó: "Pensaba que estaba cumpliendo mi parte pero esa era la parte más fácil... ¿Dónde están sus zapatos? ¿Dónde está su ropa?¿Dónde están sus maletas?". Es así como se dio cuenta del rol vital de las mujeres en el hogar y en la familia.

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Arrepentido

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Cuando una noticia te golpea de esta manera, todo aquello que quizás no parecía relevante toma una importancia muy grande ante la ausencia del otro. "Hay muchas cosas que desearía haberle dicho y oído, cosas que podría haberle pedido" señaló arrepentido y con el destino ya habiendo hecho su papel.

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Asiste a un grupo de auto-ayuda

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A Rio le costó pero finalmente se decidió en ir a un grupo de auto-ayuda: "Conocí a otros padres y esposos que habían pasado por lo mismo y descubrí que era el único que llevaba el anillo de bodas". Describió que esa situación le generó mucha verguenza pero que dejó bien claro que no había forma de que se quite su anillo.

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¿Por qué se tardó en dejarse ayudar?

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Ferdinand era consciente de que estaba mal pero a pesar de ello no se abría para recibir ayuda. "Era muy reacio a la idea de buscar ayuda. Sin embargo, después de algo así, los hombres deben ayudarse" recapacitó quien dedujo que reprimir sus sentimientos no le hubiese servido de nada.

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El mensaje para los demás esposos

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"Da todos tus sentimientos a esa persona, hazles saber que los amas y espera que te den retorno sobre eso" fue su consejo luego de perder a su media naranja. Luego del suceso, pudo ver aquello que era tan simple de hacer y que tanto afecto le hubiese brindado a su pareja.

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Volver a ser padre

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Para la mayoría de los hombres el ser padre nunca les llega porque vivimos en una sociedad machista donde la mayoría de las mujeres se encargan de los quehaceres de la casa. Ferdinand cayó en ello cuando: "Debía despertarme para llevarlos al colegio y lo hice diez minutos antes de tener que salir. Los duché, les dí el desayuno y los metí en el coche".

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De un mundo de sueños a la realidad

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Ferdinand no reniega de la vida que le está tocando transcurrir: "Tuve una vida increíble, una esposa increíble, grandes hijos y luego ¡Boom?!, Rebecca fue diagnosticada con cáncer y todo cambió". Ningún contrato millonario o el haber vestido la camiseta de la selección inglesa lo ayudó en ese momento.

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Sus planes frustrados

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Cuando se desempeñaba como futbolista pensaba en un futuro poder disfrutar en familia todo lo que había ganado, una vez ya retirado. Pero nada de ello pudo ser. Sólo le quedó enfocarse en su hijos Lorenz, Tate y Tia.

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La preocupación por sus hijos

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La mente de Ferdinand se ocupa hoy en día de sus tres niños. Por sus dichos, le preocupa más los dos hombres y sobre todo el mayor que nació en 2006 que su hija menor. "Lorenz se parece mucho a mí por eso me preocupa más" fue su explicación. Tate y Tia nacieron en 2008 y 2011.

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El consejo que le quedó de Rebecca

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Entra tantas enseñanzas que le dejó su esposa Rebecca y que muchas las consolidó una vez que ella falleció, hay una que le sigue retumbando en su cabeza. "Siempre he sido un libro cerrado para mis sentimientos. Ella me dijo que debía sacarlos porque tenía que hacer que nuestros hijos se sintieran queridos" le manifestó.

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Lo que no veía que ahora ve

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Entre tantas actividades que le han aparecido al ex defensor desde que su esposa no está más a su lado, aparecen algunas que parecerían insignificantes pero han sido todo un reto para él. "Sé lo que hace una lavadora pero no cómo lo hace" esbozó. Y añadió: "Hay toda una organización y una estructura en un hogar que los hombres no vemos".

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¿Era tan relevante su objetivo de vida?

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Su meta fue expresada con claridad: "Toda mi vida he intentado ser ambicioso en todo lo que he hecho. Cuando era joven quería ser futbolista, el mejor futbolista, jugar en grandes estadios y ganar trofeos". Y se dio cuenta que "nunca te paras a pensar en construir el mejor hogar para tus hijos y mujer".

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¿Qué diría su esposa?

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Lo que vivió Rio es una situación que nunca se termina de superar, él aún conserva el anillo de casamiento a pesar de que le aconsejaron que se deshaga de él para poder cerrar una etapa de mucho dolor. El ex futbolista asegura que está cumpliendo muy bien su nuevo rol y esbozó: "Sé que cuando ella mire hacia abajo dirá ´bien hecho´".

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El miedo por sus hijos

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Entre todas las cosas que le deben pasar por su cabeza al futbolista, hay una que no puede resolver, el sentirse triste por sus hijos. Reveló uno de sus sentimientos y temores más profundos: "Pensé que, hiciera lo que hiciera, nunca sería suficiente para ellos". Así que su dolor es doble o cuádruple mejor dicho, por él y sus 3 hijos.

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Falleció su madre

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En cuestión de dos años, la vida de Ferdinand dio un vuelco impresionante para lo negativo. A la increíble muerte de su esposa se sumó el fallecimiento de su madre, Janice St. Fort. Ella había tenido de joven a quien luego sería referente e ídolo del Manchester United y murió a los 58 años de edad el 13 de julio de 2017.

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El cáncer nuevamente

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Como si fuese una historia de terror y donde la ficción en este caso no supera a la realidad, la causa de la muerte de Janice fue cáncer. "Estamos desolados al anunciar que nuestra increíble madre Janice ha muerto hoy después de luchar una batalla contra el cáncer" expresó un comunicado familiar.

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Una gran pérdida afectiva

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Toda la familia Ferdinand coincidió en que Janice era una persona comprometida con todos ellos. "Era el centro y el corazón de la familia. Nos ha apoyado a todos en muchos momentos difíciles" expresaron. Y añadieron: "Siempre tenía una sonrisa en la cara, una gran fortaleza y coraje".

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Sus últimos minutos

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A un mes de que su madre falleciera, Ferdinand se había abierto al mundo al declarar que aún no se había repuesto de la terrible noticia de haber perdido a su esposa. En el caso de su madre sí pudo estar en los últimos instantes de vida junto a sus tres hermanos y su padre Peter Ferdinand en el hospital London Bridge.

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El pensamiento de su madre

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Janice había sido un pilar fundamental para Rio tras el fallecimiento de su esposa. Fue ella quien retrató el momento que vivió su hijo: "Va a 100 millas por hora. Creo que así es como supera su día. Simplemente no puede parar porque creo que cuando lo hace piensa sobre su pérdida. Es su manera de salir adelante.".

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Instituciones le dieron el pésame

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En esos momentos tan complicados para el ser humano, desde varios puntos del mundo le llegó el apoyo de quienes lo quieren. El Manchester United escribió en Twitter: "Nuestras profundas condolencias a Rio Ferdinand y su familia por este momento triste". La cuenta de la selección inglesa también esbozó algo similar al igual que la actriz Katie Wright.

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Sus ocupaciones diarias

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Se retiró del fútbol en mayo del 2015 y tras pasar por todos estos golpes, además de hacerse cargo de sus hijos mantiene tres caminos laborales. En primer lugar se dedica a su restaurante Rosso en Manchester. Asimismo, sigue adelante con su fundación y se ha mostrado más en televisión.

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¿Cómo afrontar el día a día?

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Para el recio ex zaguero central, lo mejor que le puede pasar es seguir trabajando. "Me siento mejor cuando estoy trabajando, es mi mecanismo de defensa, supongo. No estoy en una posición en este momento donde pueda sentarme y relajarme" expresó. La razón de ello también la esgrimió: "No me gusta tener ciertos pensamientos en mi cabeza".

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Comparó un viaje con el labor de su epsosa

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"Cuando llegas a un aeropuerto, ni siquiera miras un cartel, sólo tienes que seguir los pies de otros" fue su análisis de lo que hacía cuando viajaba en avión con el Manchester United. Algo similar, según el a lo resuelto que dejaba todo su esposa al viajar: "Todo lo que tenía que hacer era preparar mi propia maleta, ella ya había hecho todo lo demás".

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Su nueva compañera

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Ferdinand la catalogó como su compañera inseparable y le adjudicó un papel preponderante en este momento de su vida ya que es en quien encuentra consuelo. Se llama Kate Wright y es una estrella de la televisión británica. Algunos de los mensajes que le da expresa: "Siempre amada, nunca olvidada, por siempre extrañada".

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Del club a la casa

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En ese mundo de ensueños en el que vivía Ferdinand donde "sólo mueves un dedo cuando tienes que entrar a la cancha", se chocó con la realidad. "Todo me lo daban hecho. Cuando te sientas en el vestuario tu equipación está en el casillero. Y si te cambias lo tiras al suelo porque alguien luego lo recoge" dichos que valoró cuando cuando abandonó el fútbol.