Conoce a Caín Velásquez, La Máquina de Pelear
El crecimiento de las Artes Marciales Mixtas en el mundo se debe en gran parte a la dedicación de estos grandes profesionales y a sus habilidades a la hora de integrarse a una pelea. Estos tipos duros tienen una historia que contar más allá de sus golpizas en el octógono.
Las situaciones que lo han llevado a ser un luchador temible, las rivalidades que han marcado su carrera pero sobre todo las derrotas dolorosas que son las menos en un deportista de élite como Caín Velásquez son las que te revelaremos a continuación.
Sobresalió desde el inicio de su carrera
Cuando venció por KO técnico a Brad Morris, que sólo había acumulado 2 derrotas en 12 presentaciones, se supo que este californiano iba a marcar la agenda del deporte en un futuro. La fuerza en sus brazos fueron la clave en aquella pelea que le permitió a Velásquez comenzar a mostrar sus credenciales como peleador.
Tan ligado a México como a Estados Unidos
Si bien nació en suelo estadounidense, sus padres son ambos de origen mexicano. Ellos salieron de Sonora para el país del norte y criaron a su hijo allí. No fue hasta 2006 que Velásquez se decidió a unirse al mundo de la pelea en donde pudo conectar nueve victorias consecutivas hasta que llegó el primer gran golpe para su carrera.
Masacró a sus rivales
Desde aquel 7 de octubre de 2006 cuando Jesse Fujarczyk fue su verdugo en el evento Strikeforce: Tank vs Buentello que enlazaría una serie de victorias asombrosa. Desde aquella pelea en Fresno, California en la que se deshizo de su oponente en menos de 2 minutos durante el primer round y hasta el final de sus días como luchador que se forjó su leyenda.
Aprendió el don de trabajar
Para muchos el significado de trabajo es tan sólo una actividad que te permite recaudar dinero para que el día de mañana puedas realizar las actividades que te hacen feliz o mantener un estilo de vida que te agrada. Caín aprendió de su padre lo que era el trabajo. Él le brindó su ejemplo de trabajador, del esfuerzo que hay que hacer para conservarlo, de lo agotador que es y del impulso que debe llevar para lograr una mejor vida.
Fue sumando experiencia
El 16 de diciembre de 2006, Velasquez reapareció para medirse con Jeremiah Constant. El nacido en Denver, Colorado era el favorito para llevarse el encuentro por sus cuatro victorias antecesoras pero no pudo con Caín que nuevamente a través de sus puños se ganó el respeto de los presentes y derrotó a su oponente. Le tomó 4 minutos para acabar con quien no había permanecido ni siquiera 2 minutos en sus combates previos.
Une a dos países divididos
Este luchador simboliza la fraternidad que hoy en términos políticos, Estados Unidos y México no poseen. La constante lucha de la no aceptación de sus vecinos del sur en el país del norte sigue siendo tema de agenda y cuando aparece un personaje como Velásquez, ayuda a achicar la brecha entre razas, ideologías e intereses.
El camino de la confianza
Los deportes tienen un apartado que está relacionado directamente con la confianza que uno se tenga para poder lograr los objetivos, por ello, la victoria ante Brad Morris en UFC 83: Serra vs Saint Pierre 2 marcó un punto de que él podía dedicarse a la MMA. Esa fue la tercer victoria en fila, que se sumarían a otras seis que llegarían después con Jake O´Brien, Denis Stojnic, Cheick Kongo, Ben Rothwell, Antonio Rodrigo Nogueira y Brock Lesnar como derrotados.
Su primera derrota
Luego de una apilada que nadie podrá borrarle de su historial con 9 victorias en la misma cantidad de presentaciones apareció Junior Dos Santos. El brasileño se subió al octógono y en poco más de 1 minuto acabó con el cuento de hadas que vivía Velásquez. A través de un KO técnico terminó con la seguidilla del estadounidense.
Nació una rivalidad
No fue hasta poco más de un año más tarde que Velásquez no tendría la oportunidad de vengarse de su primer verdugo. Con una victoria entremedio, ante Antonio Silva el 26 de mayo de 2012 y mucho entrenamiento, tuvo su revancha el 29 de diciembre de 2012. Por decisión unánime y tras cinco largos rounds fue que Caín pudo con Junior Dos Santos.
Es fanático del fútbol
Caín demostró su amor a México cuando visitó al plantel de fútbol de dicho país en el viaje que el plantel futbolero hizo en marzo de 2018. Mientras el Tri visitaba San Francisco, se generó una reunión para que el luchador se acercara a pasar un momento con los futbolistas. Tanto él como su familia se dieron el lujo de compartir unas horas con las figuras del fútbol.
Pudo dar vuelta el historial
En las Artes Marciales Mixtas se manejan los enfrentamientos al igual que en tenis. Se tiene un registro entre jugadores de quien venció a quien y cómo es que se vinieron dando los choques. El 19 de octubre de 2013 se brindó el espectáculo final entre Junior Dos Santos y Velásquez en el cual el estadounidense pudo vencer.
Brown Pride
Quienes han visto alguno de los combates de Caín podrán ver estas dos palabras tatuadas por encima de sus pectoralesBrown Pride. Para el luchador, dicha frase lo define en cuanto a quien es él. Y ha añadido sobre su significado que: "Habla de donde vengo, de quiénes son mis padres. Representa la lucha de mi familia. Estoy realmente muy, pero muy orgulloso".
Segunda y última derrota de su carrera
Como están acostumbrados a salir victoriosos, cada encuentro que se acaba perdiendo en una pelea de Artes Marciales Mixtas -al igual que en boxeo- puede ser letal. El derrotado puede no volver a encontrar su rumbo a pesar de continuar participando de otros combates. Quien le dio el segundo cotejo negativo a Caín fue Fabricio Werdum, el 13 de junio de 2015.
Metas a corto plazo
Todos los deportistas de élite concuerdan en que para destacarse en lo suyo debieron ir cumpliendo diferentes objetivos hasta que finalmente dieron con el premio máximo de ser competitivos de gran manera. En cada práctica de gimnasio, Caín se plantea ser el mejor entre sus compañeros de talla y que pueden poner en aprietos al campeón de peso semicompleto de UFC, Daniel Cormier.
Última presentación
Hasta junio de 2018, la última vez que se lo vio a Caín Velásquez dentro de un octógono fue cuando el 9 de julio de 2016 se presentó en el evento Tate vs Nunes y venció tras menos de 5 minutos en el primer round a Travis Browne. Si bien el californiano se ha tomado descansos de más de dos años entre pelea pelea en alguna ocasión, parece ser que no está convencido en regresar.
¿Cuáles son sus objetivos?
Los días de Caín dentro de un octógono parecen haber acabado, no sólo por su inactividad sino por el período de dos años que ha pasado sin combatir, hecho que a sus 35 años sería difícil de recuperar. La nueva aventura de Velásquez podría ser la Lucha Libre ya que estaría siendo tentado por la WWE -Entretenimiento Mundial de Lucha- para sumarse a su proyecto.
Contra un viejo desconocido, en un nuevo ámbito
En el acercamiento que Caín ha tenido con el mundo de la Lucha Libre, se ha abierto una ventana para que el luchador rete a uno de sus ex compañeros de las Artes Marciales Mixtas. Cuando visitó alguno de los cuadriláteros en febrero de 2018, Velásquez publicó en Twitter: "Primer evento de la WWE! Podría sentirme como en casa aquí! Brock Lesnar, no me molestaría conseguir otro título al enfrentarte".
Se ganó el respeto de todos
Velásquez fue denominado como el hombre más intimidante y duro del planeta antes de su combate contra Werdum. El entrenador de AKA, Javier Mendez lo había catalogado como The Terminator y elogios desde todos lados del plantea le llegaron. Sin embargo, el físico no le supo responder ya avanzada su carrera y las lesiones lo condicionaron.
Reprensenta más que a sí mismo
Para Caín, el hecho de haber logrado avanzar en tal medida en los Estados Unidos reivindica la lucha de sus padres por haber podido establecerse en el país del norte. Su padre, había cruzado ilegalmente la frontera luego de una travesía de película y trabajó en el campo cosechando lechuga, coliflor y brócoli en el oeste americano.
Se refugia en su familia
Ya alejado del deporte, Caín sigue con la rutina del gimnasio aunque de menor exigencia y retorna a su hogar junto a su esposa Isabel y sus tres hijos. Es ella que aún recuerda el momento en el que se unieron: "Yo le pregunté, ´¿Estás enamorado o solo intentas conseguir la residencia?´. Pero era amor". Ya con 40 años de casados ambos revelan que ni siquiera hablan, sólo se miran y ya saben lo que cada uno piensa.
